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Estas gotas de hierbas suecas que bien podrían
considerarse la panacea para día de hoy fueron descubiertas y creadas por el
Dr. Samst y el Dr. Urban Hjärne, de la Facultad de
Medicina en Estocolmo, Suecia, aunque hay que decir que la fórmula
original es de Paracelso. Ellos la estudiaron y la definieron. Es decir, que
existe desde el siglo XVIII y a día de hoy sigue siendo vigente y se confirma
su eficacia ante las dolencias que les comentaré más adelante.
Se dice que María Treben, una mujer que
enfermó después de haber estado en un campo de
refugiados, pudo sanar con estas gotas de hierbas
suecas. Al principio ella era escéptica, no pensaba que eso pudiera ayudarle
porque padecía tifus con ictericia y oclusión intestinal y ningún médico podía
ayudarla. La joven alemana fue llevada a Austria donde la empezaron a tratar
con las gotas de las hierbas suecas de un olor bastante fuerte y característico
y un color marrón que no las hacen nada agradables a la vista.
Según el prospecto de las gotas, este líquido
casi “milagroso” puede ayudar a tratar nada más y nada menos que 46 trastornos.
Treben empezó a usarlas sobre las zonas que le dolían del cuerpo con la ayuda
de un algodón y luego cubriendo la zona con una bolsa de nylon. Este líquido le
daba cierto calor que aliviaba su dolor. Y a partir de ahí decidió extender el
uso de las gotas con todos sus conocidos y familiares ayudando a tratar
trastornos como torceduras, golpes, heridas, picadura de
insectos, artritis, hematomas, dolores de cabeza, sinusitis, catarros, asma,
cólicos biliares, oclusión intestinal, cólicos renales,
gastritis, estreñimiento, sordera, tartamudez, epilepsia,
infecciones parasitarias, hemorragias
intestinales, flebitis, trombosis, vista
cansada, desprendimiento de la retina, mareos…
¿Qué
contienen las gotas de hierbas suecas?
10 g pulpa sábila (Aloe vera)
10 g hojas eucalipto o alcanfor (Eucalyptus
globulus)
10 g de tallos o corteza de cuasia (Quassia amara)
10 g raíz de ruibarbo (Rheum officinale
10 g hojas alcachofa (Cynara scolymus)
10 g hojas y tallos o semillas de hinojo
(Foeniculum vulgare)
10 g hojas hierbabuena (Mentha x piperita)
10 g partes aéreas de estafiate (Artemisia
ludoviciana ssp. mexicana)
10 g hojas de boldo (Peumus boldus)
3/4 litro de vino jerez o 250 ml de alcohol de caña
y 750 ml de agua
100 g de azúcar mascabado o miel de abeja o
fructosa
¿Cómo deben
aplicarse las gotas de hierbas suecas?
Uso interno: se tiene que diluir en agua. Una
cucharada en una taza de agua, y mejor si se toma por la mañana y en
ayunas, es decir, unos quince minutos antes desayunar. En caso de padecer un
trastorno crónico debería tomarse cada 8 horas.
Uso externo: si se usan compresas es lo
mismo que decir usar un pedazo de algodón, tela o gasa que se debe
empapar con las hierbas suecas y aplicar directamente sobre la parte
afectada, previamente untada con vaselina o crema. Luego tenemos que
poner un plástico que ayude a mantener el calor y no manche la ropa.
se puede cubrir la compresa y plástico con una venda.
Para que haga efecto debemos mantenerlo al menos 4
horas e incluso dejarlo durante toda la noche para que sea más eficaz.
Una vez se quite es recomendable poner crema hidratante
o polvos de talco.
Es muy importante que las personas que tengan la
piel sensible no se pongan un plástico sino que lo cubran con un lienzo.
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